miércoles, 2 de mayo de 2007

4 HORAS...

... menos cinco minutos.
Eso es lo que he tardado esta mañana en salvar la distancia, unos 60 km, que separa Rociana de Sevilla.
El camino que he realizado tantas veces para diversas gestiones en escasos 40 minutos, se ha convertido hoy en un infierno insoportable.
La culpable, la lluvia intensa y persistente que ha caido desde mitad de la madrugada, así como la obra que se encuentra en proceso para, creo, ampliar el número de carriles en la entrada de Sevilla. Todo esto ha hecho que se produjera un atasco de unos 19 km, llegando a ser de hasta 25 en las horas más intempestivas.
La verdad es que no sé como describirlo, coches parados completamente, que te entraban ganas de bajarte y seguir caminando, ya que se han estado divisando los primeros edificios sevillanos durante, al menos, 2 horas. Mirabas por la ventanilla y se veía como las personas resoplaban, hablaban por el móvil y no encontraban explicación.
En la radio buscamos la respuesta, ya que no se ve ningún accidente ni nada parecido. El locutor comenta, preocupado, que el problema son las inundaciones que ha provocado el agua en ciertos barrios, puentes y edificios de Sevilla y de algunos de los pueblos cercanos a la capital.
Esto me hace pensar algo: ¿qué pasaría si viviesemos en un país en el que la situación meteorológica de hoy se repite constantemente? Se produciría un caos diario. Cuando llueve en España, y más en Andalucía, todo el mundo llega tarde, enfadado, los niños tienen excusa para no ir al colegio y los universitarios para quedarse en la cama...

Lo cierto hoy es que, los médicos han tenido que esperar a sus pacientes, los jefes a sus empleados y los clientes a los dueños de los bares y cafeterías. Todos ellos hacían un gran esfuerzo por llegar lo antes posible diciendo: "A ver si puede ser que llegue a las 11...".

Gracias a Dios, mi médico también ha esperado, y he podido aprovechar el viaje (que daba por perdido al llegar 2 horas tarde a la consulta) y realizarme la revisión de mi operación de miopía. Al menos una buena noticia, mi nivel de visión es de... un 125 %!! Increíble, ya decía yo que nunca había visto tan bien.


La Hermanita de la Caridad

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Supongo que si viviésemos en un país con lluvias constantes, las infraestructuras estarían acondicionadas a ese clima, y el problema sería cuando hiciese mucho sol.

Aquí nos causa problemas cuando cae una tromba como la de hoy precisamente porque como ocurre pocas veces, no sale rentable adaptarse.

Por desgracia, incluso las minorías meteorológicas son discriminadas!

Anónimo dijo...

A mi también me ha pasado, he tardado desde Bollullos del Condado hasta Umbrete la friolera de 2 horas y media, un trayecto que puede tardarse unos 25 minutos... teniendo que olvidarme de una reunión en Sevilla para llegar a tiempo a otra en palomares, por lo menos a un sito pude llegar a tiempo. Un saludo y enhorabuena por lo de tu vista.

Hermanita de la Caridad dijo...

Claro, ayer todo el mundo llegó tarde!
Fue un infierno, ya os digo, no sabía ni como ponerme. Además, cuando yo volvía a Rociana a eso de las 2 menos algo, aún había unos 16 kms de retención a la entrada. Me agobiaba solo de mirar el "carril del infierno".

Callejuelo dijo...

Ese es el problema de entrar en una ciudad tan grande, que cuando se junta la lluvia y las obras, se convierte en un coctel peligroso. Despues de tu operación y con tanto potingue como te has echado, has acabado viendo más de la cuenta. Nos vemos (ahora me verás mejor)

Blog Widget by LinkWithin